Hay 3 métodos para hacer trading con criptomonedas, cifrado de datos, compra de bitcoins y trading con CFDs de Bitcoin:
Método 1. Cifrado de datos
La primera forma de conseguir Bitcoins fue a través del minado. En 2009, cada bloque minado traía una recompensa de 50 Bitcoins a aquellos que resolvían el programa de cifrado. A día de hoy se puede comprar hardware especializado en cifrado y se recibirá un pago en Bitcoins por la contribución al sistema de IT. Sin embargo, esto requiere conocimientos especializados de programación y hardware avanzado, lo que no es
precisamente barato.
Método 2: Compra de Bitcoin.
Es posible establecer una cuenta anónima de criptodivisas y comprar la propiedad de una criptomoneda a través de una Bolsa de criptodivisas que realiza la función de intermediario. Sin embargo, los riesgos de este método aparecen por dos lados:
En primer lugar, cuando abrimos una transacción en una Bolsa de criptomonedas, los fondos no están en nuestra cuenta individual sino en la cuenta de la Bolsa en cuestión. Desafortunadamente, incluso en la breve historia de las criptodivisas, ya hemos sido testigos de algunos espectaculares ejemplos de cómo algunas bolsas cerraban, desapareciendo junto con todos los fondos de los clientes (Mt Gox). Existen también ejemplos de Bolsas de criptomonedas que han sido atacadas por hackers. (Bithumb)
En segundo lugar, si perdemos nuestro número de usuario o nuestra contraseña, o si alguien roba nuestra cuenta, perderemos de forma irrevocable nuestras criptomonedas, sin posibilidad alguna de solicitar ayuda. No existe lugar donde pudiésemos recuperar los datos perdidos ni los Bitcoins robados.
Método 3: Trading con CFDs de Bitcoin
El último método señalado es la posibilidad de hacer trading con Bitcoins utilizando contratos por diferencia. ¿No estás familiarizado con este término? Los contratos por diferencia (CFDs) te permiten tomar una posición en el valor de los Bitcoins y aprovechar los movimientos de su precio, tanto al alza como a la baja. Es importante recordar que, como cualquier otro producto derivado, el inversor no posee el activo subyacente, (en este caso, Bitcoins) sino que simplemente está especulando con los movimientos de su precio.
Si el inversor asume que el precio del Bitcoin va a caer, tomaría una posición de venta o iría corto. Si el inversor asume que el precio del Bitcoin va a aumentar, tomaría una posición de compra o iría largo. Este método puede ser muy ventajoso considerando el hecho de que tanto el Bitcoin en particular como el mercado de criptodivisas en general, es propenso a unos movimientos de precios muy agresivos. Sin embargo, cuando operamos en CFDs sobre Bitcoins, estaremos operando en productos apalancados, lo cual podría llevar un nivel de riesgo importante ya que existe la posibilidad de que los movimientos de los precios vayan en contra del inversor. Las pérdidas pueden exceder los depósitos y podrían ser requeridos pagos adicionales. Es importante, además, tener en cuenta que la volatilidad incrementa el riesgo. Además del Bitcoin, existen ciertos riesgos que podrían afectar negativamente en el futuro.
Tecnologías competitivas
Existen a día de hoy ya muchas criptodivisas que ofrecen soluciones competitivas al Bitcoin. Esto incluye a las que a día de hoy son las mayores en cuanto a capitalización como Ethereum, Litecoin, Dash y Ripple.
Eficiencias de costes
La cuestión principal aquí es si las transacciones de Bitcoin se pagarán en el futuro. Y sobre todo, ¿Qué ocurrirá cuando el último Bitcoin sea descifrado?
Regulación
Las transacciones de Bitcoin son completamente anónimas y se desarrollan fuera del sistema oficial de leyes e impuestos. Los Bitcoins pueden ser utilizados con fines criminales como lavado de dinero o compras en la “dark web”.
Numero de transacciones
En este momento, cada 10 minutos es posible ejecutar transacciones de hasta 2100 Bitcoins. Si la popularidad del sistema continúa con su crecimiento, esta cantidad podría quedarse muy pequeña..
Frecuencia de las transacciones
Una transacción cada 10 minutos podría ser demasiada poca frecuencia y muy poco atractiva en un futuro.
En conclusión, si:
- No tenemos conocimientos avanzados de programación.
- No contamos con un hardware especializado.
- No somos conscientes de los riesgos asociados a la hora de comprar criptodivisas.
- Nos gustaría aprovecharnos tanto de los incrementos como de las bajadas en los precios de las criptodivisas.
Los CFDs podrían ofrecer un valor alternativo para aprovecharse de la volatilidad de las divisas digitales. Es importante leer y tener en cuenta los riesgos y características del Trading en CFDs.
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