¿Qué es la volatilidad?
La volatilidad se refiere a la cantidad de incertidumbre, riesgo y fluctuación de cambios que puede experimentar un instrumento financiero en un momento concreto. Se trata de la medición estadística de la dispersión de retorno para un instrumento dado y puede ser de dos tipos: histórica y esperada.
En tiempos de alta volatilidad en los mercados, los precios tienden a cambiar rápida y dramáticamente en un período de tiempo corto. Cuando los mercados no están volátiles o “flat”, los movimientos de mercado y tendencias se forman gradualmente. La volatilidad puede ocurrir luego de datos macroeconómicos o luego de eventos inesperados como desastres naturales o eventos políticos.
Los inversores más experimentados tienden a operar en tiempos de alta volatilidad, buscando abrir y cerrar posiciones en períodos de tiempo cortos.
En la pantalla de arriba tenemos un gran ejemplo de tanto alta como baja volatilidad. Esto normalmente ocurre después de un dato macroeconómico significativo que los traders esperaban. Después de publicado el dato, se puede desarrollar un movimiento fuerte o significativo muy rápidamente – como vemos en el gráfico del EURUSD anterior.
Este ejemplo en particular se dió tras la publicación de las nóminas no agrícolas. Es interesante también observar que una vez terminada la reacción inicial al dato, el mercado perdió su volatilidad y regreso al trading de rango-límite.
El ejemplo de la pantalla de arriba es resultado del Brexit, donde el UK100 cayó más de 600 pips en menos de una hora, mostrando el incremento de la aversión al riego hacia la economía británica en el corto plazo.
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