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El ratio de endeudamiento es un indicador financiero que mide la proporción de deuda que tiene una empresa respecto a los recursos propios que ha generado y que puede ser de gran utilidad de cara a valorar posibles inversiones. En este artículo, te contamos cómo se calcula y cómo interpretarlo.
El ratio de endeudamiento es un indicador clave para evaluar la salud financiera de una empresa, ya que relaciona sus recursos propios con sus obligaciones financieras. En este artículo, te explicamos qué es exactamente esta métrica, cómo se calcula y cómo podrías aplicarla a nivel personal.
¿Qué es el ratio de endeudamiento?
El ratio de endeudamiento es un indicador financiero que mide la proporción de deuda que tiene una empresa respecto a los recursos propios que ha generado. Esta métrica refleja qué parte del capital utilizado por una compañía procede de financiación ajena y resulta fundamental para medir su capacidad para asumir deudas y obligaciones.
El ratio de endeudamiento es un concepto clave a la hora de valorar la estructura financiera de una empresa y su dependencia a la financiación de terceros. Este indicador ofrece una panorámica clara sobre el grado de endeudamiento de una empresa, por lo que resulta esencial tanto para los empresarios, que pueden emplearlo para orientar sus decisiones estratégicas, como para los propios inversores, que pueden utilizarlo para valorar el riesgo de invertir en determinados proyectos.
En concreto, un ratio de endeudamiento elevado indicará que la empresa está excesivamente endeudada, lo que supone un riesgo para su continuidad en el mercado. Por el contrario, un ratio de endeudamiento reducido podría implicar que la empresa está aplicando un enfoque demasiado proteccionista, sin aprovechar al máximo las posibilidades que ofrece el apalancamiento para expandirse en el mercado. A la hora de valorar este ratio y la salud financiera de una empresa, no obstante, será necesario tener en cuenta el contexto en el que se mueve y otros indicadores financieros, como puede ser el ROE, el ROI, el TIR o el ratio de solvencia, entre otros.
Tipos de ratio de endeudamiento y su análisis
A la hora de medir el endeudamiento de una empresa, podemos recurrir a distintos tipos de ratios de endeudamiento, en función del foco que pongamos en las deudas y recursos de una empresa.
Ratio de endeudamiento total
Es aquel que mide la proporción del activo financiado con deuda. Como su propio nombre indica, relaciona los bienes y derechos que posee una empresa con sus obligaciones financieras. Resulta ideal para conocer la dependencia global de financiación ajena.
Ratio deuda/patrimonio
Este ratio de endeudamiento muestra cuántos euros de deuda hay por cada euro de fondos propios.
Endeudamiento a corto plazo
Como su propio nombre indica, es aquel que mide la capacidad de un negocio para hacer frente a las deudas a corto plazo, por lo que resulta clave para analizar la liquidez de una compañía. Al centrarse en las deudas a corto plazo, se calcula a partir del pasivo corriente de una empresa, es decir, a partir de todas las deudas con un plazo de vencimiento inferior a un año.
Endeudamiento a largo plazo
Este ratio de endeudamiento se centra en la estructura de financiación de una empresa a largo plazo, por lo que resulta de gran utilidad de cara a evaluar su estabilidad. Al enfocarse en el largo plazo, se calcula a partir del pasivo no corriente, que son todas aquellas deudas con un plazo de vencimiento superior a un año.
Fórmulas del ratio de endeudamiento
El ratio de endeudamiento es un cociente matemático que se obtiene al relacionar los fondos propios de una empresa con sus deudas y obligaciones financieras, ya sea a corto o largo plazo. Este indicador se obtiene aplicando una fórmula, la cual variará en función del tipo de ratio que queramos obtener.
Ratio de endeudamiento total = Pasivo total ÷ Activo total.
Ejemplo: una empresa tiene un activo total de 800.000 € y un pasivo total de 320.000 €.
Cálculo: 320.000 / 800.000 = 0,4.
Ratio deuda/patrimonio = Pasivo total ÷ Patrimonio neto.
Ejemplo: una empresa presenta un pasivo total de 500.000 € y un patrimonio neto de 250.000 €.
Cálculo: 500.000 / 250.000 = 2.
Ratio de endeudamiento a corto plazo = Pasivo corriente ÷ Patrimonio neto.
Ejemplo: pasivo corriente (deudas a menos de un año) de 150.000 € y un patrimonio neto de 600.000 €.
Cálculo: 150.000 / 600.000 = 0,25.
Ratio de endeudamiento a largo plazo = Pasivo no corriente ÷ Patrimonio neto.
Ejemplo: la empresa tiene un pasivo no corriente (deudas a más de un año) de 700.000 € y un patrimonio neto de 500.000 €
Cálculo: 700.000 / 500.000 = 1,4.
A la hora de aplicar estas fórmulas, se deberán tener claros los siguientes conceptos:
Pasivo total: engloba todas las deudas que ha contraído una empresa, tanto a corto como a largo plazo.
Activo total: incluye todos los bienes y derechos que posee la empresa y que se utilizan para generar ingresos.
Patrimonio neto: es la diferencia entre los activos y pasivos que posee la empresa.
Pasivo corriente: hace referencia a las deudas y obligaciones que ha asumido la empresa y que tienen una fecha de vencimiento inferior a un año.
Pasivo no corriente: encuadra todas las deudas y obligaciones contraídas por la empresa a largo plazo, es decir, con un plazo de vencimiento superior a un año.
¿Cómo se interpreta el ratio de endeudamiento?
Interpretar correctamente el ratio de endeudamiento resulta clave para medir la dependencia de una empresa a terceros y su capacidad para asumir sus deudas y obligaciones financieras. En este caso, al aplicar la fórmula, pueden darse tres situaciones:
El ratio de endeudamiento es mayor que 0,6: implica que la compañía tiene un alto nivel de deudas, por lo que es muy dependiente a la financiación de terceros. Se trata de una situación de riesgo, por lo que es importante que la empresa tome medidas para bajar este nivel.
El ratio de endeudamiento se sitúa entre un 0,4 y un 0,6: muestra un nivel equilibrado entre endeudamiento y aprovechamiento de las oportunidades del apalancamiento. Implica que la empresa ha encontrado un balance entre el capital proveniente de terceros y sus recursos propios, por lo que demuestra una buena autonomía financiera.
El ratio de endeudamiento es menor que 0,4: significa que la empresa tiene un nivel de endeudamiento muy reducido, lo que puede implicar que tiene un perfil muy conservador en cuanto al uso de sus recursos, ya que podría estar dejando pasar oportunidades de inversión con las que expandirse. No obstante, no supone, per se, una situación de riesgo, ya que tiene capacidad para asumir sus deudas sin comprometer su estabilidad.
A la hora de valorar el ratio de endeudamiento de una empresa, habrá que tener en cuenta el sector en el que opera la compañía y su antigüedad, dado que hay negocios, como las startups que pueden incurrir en mayores deudas en sus fases de vida iniciales, a fin de impulsar sus nuevos proyectos. De igual manera, también será conveniente valorar el contexto económico, ya que factores como la inflación o la desaceleración económica pueden impactar en las cuentas de las empresas, y analizar el nivel de deuda tanto a corto como a largo plazo. Para obtener una mejor panorámica del estado de salud de la empresa, además, será conveniente combinar este ratio con otros indicadores, como los ratios de liquidez o solvencia, ya que estos nos ofrecerán información sobre otros aspectos clave de la contabilidad de la empresa.
Capacidad de endeudamiento personal
Aunque el ratio de endeudamiento suele vincularse con las empresas, este indicador también puede aplicarse a nivel personal. De hecho, en las entidades bancarias, muchas veces se calcula para valorar la posibilidad de ofrecer un préstamo o hipoteca a un usuario. En este caso, el ratio de endeudamiento relaciona los gastos que debe asumir una persona mes a mes, como puede ser el alquiler, la letra del coche o el crédito de una tarjeta, con sus ingresos mensuales, y resulta de utilidad de cara a valorar si podríamos contratar financiación externa.
Según organismos como el Banco de España, el nivel de endeudamiento máximo que debería asumir una persona con un crédito sería del 35%, aunque, en el caso de la concesión de créditos hipotecarios, este porcentaje puede ascender hasta un 40%. Para valorar si nos situamos por encima del umbral, basta con calcular nuestra capacidad de endeudamiento con la siguiente fórmula:
Capacidad de endeudamiento = (Ingresos mensuales - Gastos mensuales) x 0,35
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Veámoslo con un ejemplo. Imaginemos que una persona percibe unos ingresos mensuales de 2.500 euros y que tiene unos gastos totales de 1.000 euros. Aplicando la fórmula, obtendríamos que su capacidad de endeudamiento es de 350 euros, por lo que la cuota máxima de cualquier producto financiero que quiera contratar no podría superar esta cifra.
Consejos para optimizar el ratio endeudamiento
Mantener el ratio de endeudamiento bajo control es importante tanto para las empresas como para los propios ciudadanos. En este sentido, a la hora de optimizar nuestra situación financiera y reducir nuestras deudas con terceros, hay ciertos consejos que podemos seguir.
Para empresas
Renegociar condiciones de deuda: aplazar vencimientos, negociar intereses más bajos o cambiar deuda de corto a largo plazo.
Revisar la política de dividendos: reducir el reparto de dividendos para fortalecer el patrimonio neto si el ratio es alto.
Buscar financiación alternativa: usar capital riesgo, subvenciones o crowdfunding para evitar mayor endeudamiento financiero.
Vigilar el ciclo de caja o cash flow: controlar inventarios y cobros para no depender de créditos bancarios a corto plazo.
Para particulares
Evita el sobreendeudamiento: si ya tienes préstamos, no solicites nuevos sin revisar tu ratio global.
Refinancia deudas caras: agrupa créditos con tipos elevados en uno con mejores condiciones.
Prioriza el ahorro: contar con un colchón financiero reduce la necesidad de recurrir al crédito.
Evalúa antes de invertir: si inviertes, asegúrate de que puedes asumir pérdidas sin comprometer tu estabilidad financiera.
El ratio de endeudamiento es esencial para valorar el riesgo financiero tanto en empresas como a nivel personal, ya que refleja el margen que hay para nuevas inversiones o cuándo conviene mejorar la estructura de deuda. Combinado con otras métricas, será clave de cara a valorar una posible inversión.
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El ratio de endeudamiento es un indicador financiero que mide la proporción de deuda que tiene una empresa respecto a los recursos propios que ha generado y que refleja qué parte del capital utilizado por una compañía procede de financiación ajena. Esta métrica resulta clave a la hora de valorar la estructura financiera de una empresa y puede ser de gran utilidad tanto para los empresarios, que pueden emplearlo para tomar sus decisiones, como para los inversores, que pueden utilizarlo para medir el riesgo de invertir en determinados proyectos.
A la hora de medir el nivel de endeudamiento de una empresa, se pueden recurrir a varios ratios:
Ratio de endeudamiento total: es el que mide la proporción del activo financiado con deuda.
Ratio deuda/patrimonio: es el que muestra cuántos euros de deuda hay por cada euro de fondos propios.
Endeudamiento a corto plazo: es aquel que mide la capacidad de un negocio para hacer frente a las deudas a corto plazo.
Endeudamiento a largo plazo: es el que se centra en la estructura de financiación de una empresa a largo plazo.
El ratio de endeudamiento es un cociente matemático que puede calcularse con distintas fórmulas, en función del tipo de ratio que queramos obtener:
Ratio de endeudamiento total = Pasivo total ÷ Activo total.
Ratio deuda/patrimonio = Pasivo total ÷ Patrimonio neto.
Ratio de endeudamiento a corto plazo = Pasivo corriente ÷ Patrimonio neto.
Ratio de endeudamiento a largo plazo = Pasivo no corriente ÷ Patrimonio neto.
Al calcular el ratio de endeudamiento, pueden darse tres situaciones:
El ratio de endeudamiento es mayor que 0,6: implica que la compañía tiene un alto nivel de deudas, por lo que es muy dependiente a la financiación de terceros.
El ratio de endeudamiento se sitúa entre un 0,4 y un 0,6: muestra un nivel equilibrado entre endeudamiento y aprovechamiento de las oportunidades del apalancamiento.
El ratio de endeudamiento es menor que 0,4: significa que la empresa tiene un nivel de endeudamiento muy reducido, lo que puede implicar que tiene un perfil muy conservador en cuanto al uso de recursos.
A la hora de optimizar el ratio de endeudamiento, hay ciertos consejos que las empresas pueden aplicar:
Renegociar condiciones de deuda.
Revisar la política de dividendos.
Buscar financiación alternativa.
Vigilar el ciclo de caja o cash flow.
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